Primeros pasos de Vox en la Junta, usar la Fundación Castilla y León para que el dinero público siga fluyendo para los de siempre

Vox ha entrado en el Gobierno Regional con la inercia habitual de que siga fluyendo el dinero público hacia los mismos. Atrás quedó el anuncio de Juan García Gallardo sobre cortarle el grifo al expresidiario Míchel Méndez Pozo en lo que financiación de sus medios se refiere.
El entonces candidato de la formación avanzó en una entrevista televisiva que quería poner fin a los más de 20 millones anuales que dedica la Junta de Castilla y León a pagar la televisión privada del señor Méndez Pozo. Pero parece más fácil de decir que de hacer.
Y es que, una de las primeras decisiones que ha tomado el nuevo presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, ha sido permitir que el dinero de la publicidad institucional siga el flujo habitual, bordeando aquel anuncio realizado por García Gallardo. No, no ha decidido contratar dinero en la tele del expresidiario, ha optado por dejar fuera a todas las televisiones de Castilla y León en la habitual campaña que la Fundación Villalar plantea cada vez que se acerca el día de Castilla y León, el 23 de abril.
Pero la letra pequeña de este plan es, como poco curiosa. Porque sí ha contratado publicidad en otros tantos medios de comunicación, como es el caso de los periódicos del Grupo Promecal, que lo que no perciben vía televisión lo van a ingresar vía papel.
El juego de la bolita al que la vieja política nos tenía acostumbrados también se juega sobre la mesa de la llamada nueva política. Se anuncia que se va a cortar un grifo descarado que suma ya más de 240 millones de euros de dinero público utilizados para competir contra otras empresas, se corta el grifo a todo hijo de vecino y se abre una ventanita para que, al menos, aquel que ha venido llenándose los bolsillos con el dinero de todos siga haciéndolo una vez más.
Más de lo mismo y aún no se ha cumplido ni tan si quiera el primer mes desde la toma de posesión del cargo de Carlos Pollán.