Pleno Municipal. Lo importante no es solucionar problemas, sino dejar claro quién es peor
Las proposiciones que se elevan a Pleno para instar a otros a hacer cosas tienen muy poco recorrido. En la práctica totalidad de las ocasiones, una vez aprobadas llegan al final de su vida útil porque, aún dirigiéndose al receptor de la misma, éste hará lo que le parezca, porque para eso es su competencia.
Este viernes, además, se ha vuelto a poner de manifiesto cómo estas proposiciones no tienen como objetivo resolver ningún problema de los burgaleses, sino dejar claro quienes son mejores y quienes peores.
El PSOE elevaba su proposición para pedir que se retomen las obras de ampliación del Museo de Burgos, porque la Junta de Castilla y León se había comprometido en 2018 y al final no había hecho nada, dejándose caducar el convenio.
PP y Vox estaban encantados con la idea de pedir a la Junta que se ponga las pilas. Pero también al Gobierno de España, titular del mismo. Lo curioso es que las discrepancias entre PSOE, PP y Vox no se centraban en quién es el competente, sino en decir que la Junta quiso o no cumplir o que el PSOE, mientras gobernó Burgos no hizo nada.
Para más cachondeo, Vox anunció el jueves que, en caso de no llegar a un acuerdo, ellos elevarían una moción de urgencia para votar lo mismo, pero culpando al PSOE. Pero la moción no ha podido ni tan si quiera someterse a votación, para saber si es urgente o no, porque el secretario ha recordado que no puede incorporarse una moción de urgencia al Pleno, si se pretende tratar un tema que ya figura en el orden del día.
Así que, si realmente instar a la Junta, mediante proposición, sirviera para algo, este viernes los burgaleses habríamos perdido una oportunidad de oro, solo porque nuestros representantes estaban con sus cosillas.
