Parchean, a su ritmo, el carril bici del empecinado

El Ayuntamiento de Burgos ha parcheado el carril bici del Paseo del Empecinado, tras la denuncia, hace semanas, de la Asociación de Vehículos de Movilidad Personal de Burgos en redes sociales.
El problema es la celeridad. Este carril bici es uno de los más transitados de la ciudad. No es, ni de lejos, el que mejor trazado ni el que cuenta con las mejores condiciones de movilidad en esta parte de su recorrido. Por ello, el arreglo de este carril debería haber sido no solo prioritario, sino rápido. Esto ha sido así, provocando que sus usuarios invadan la estrecha acera que separa la barandilla del río del propio carril.
Es significativo destacar el hecho de que esta acera no cuenta con la anchura necesaria que corresponde a los itinerarios peatonales accesibles, que fija dicha medida en 1,8 metros.
El trazado del carril bien podía haberse adecuado hace apenas un año, cuando se actuó, también de urgencia, unos metros más abajo, junto al puente Besón, para arreglar los problemas causados por el agua del río que viaja paralelo a la vía verde y que transcurre por el subsuelo burgalés.
Entonces, varios colectivos ligados a la movilidad, subrayaron la necesidad de modificar el trazado del carril para pacificar el entorno. Una propuesta que no tuvo la aceptación necesaria, perdiendo así la oportunidad de arreglar el entorno y el carril al mismo precio.
El paseo del empecinado es, en su conjunto, una zona que requiere de una actuación integral para acometer varias mejoras que, a día de hoy, constituyen una movilidad obsoleta e insegura.
Empezando por la barandilla del río, cuya altura apenas se eleva un metro desde el suelo y la citada acera que no cumple con la anchura mínima.
En carril bici debería estar separado de la acera y bajado a cota de calzada, segregándolo de esta, siguiendo lo que dicta el Plan de Movilidad Urbana Sostenible.
En este sentido, el cruce entre el Paseo del Empecinado y el Puente Castilla necesita mejorar significativamente, también en consonancia con el carril bici. A determinadas horas del día, el tránsito de peatones entre pasos de cebra genera conflictos entre peatones y ciclistas por el escaso espacio existente.
Ya en la calzada, el giro a la izquierda tras la parada de autobús en sentido Puente de Castilla debería desaparecer, para facilitar la fluidez del tráfico, toda vez que la rotonda, unos pocos metros más adelante, ya facilita el cambio de sentido.