El desafortunado cartel que cuelga en las piscinas que llevan el nombre de una atleta paraolímpica

En estos confusos tiempos para el lenguaje, hay expresiones que parecían haberse superado ya. Una de ellas es el término «minusválido», cuya etimología no es la correcta para hablar de discapacidad, pues lejos de definir nada, ensalza la condición de persona menos válida.

Y sí, es una palabra que aparece en el diccionario de la Real Academia de la Lengua como otras muchas que han ido cayendo del vocabulario institucional y, afortunadamente, del social.

Pero, además, el cartel que ilustra estas fotos está colocado en el complejo de las, recién renombradas, piscinas Marta Fernández Infante, la nadadora paraolímpica que, en caso de querer acceder al gimnasio de este complejo debería pasar por este torno.

Asumiendo que es un error del propio Ayuntamiento, fruto de un descuido del todo desafortunado, la sección que dirige Levi Moreno debería retirar este cartel y sustituirlo, si es que hace falta, por otro más acorde y respetuoso.