El Ayuntamiento tendrá que reorganizarse ante la falta de espacio y la incorporación de nuevos funcionarios

La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, ha anunciado la intención de su Equipo de Gobierno de reorganizar el espacio de trabajo en las diferentes dependencias municipales.
Más que una intención es una prioridad, ante el «problema real de espacio» que existe y que ya en el pasado mandato intentó abordar el anterior alcalde.
Eso sí, De la Rosa estuvo a punto de convertir al Ayuntamiento y a los burgaleses en víctimas de un pelotazo, al querer comprar un edificio en el Paseo del Espolón por casi 3 veces del precio por el que se lo habían ofrecino inicialmente.
Por el momento, Ayala no ha querido entrar en detalles sobre cómo se plantea dicha organización porque, de hecho, aún no está del todo cerrada. Este domingo, los concejales del Partido Popular y de Vox celebraron una jornada de trabajo, coincidiendo con los 3 meses desde que arrancase el nuevo mandato, donde entre otros asuntos se trató esta reorganización.
Lo que sí ha hecho la alcaldesa es poner algunos ejemplos de lo que se viene en las próximas semanas. Por un lado, los empleados de la Oficina de la Movilidad deberán buscar nuevos espacios, ya que ésta se encuentra en los bajos del Mercado Norte, al que ya no le queda mucho recorrido. Por otro, en el centro cívico de la calle San Juan, quedarán liberados, en breve, 500 metros cuadrados, cuando los funcionarios de Justicia se trasladen a sus nuevas dependencias en la Avenida de la Paz.
Con todo, la previsión es que el área de Estadística del Ayuntamiento también afronte modificaciones, dentro de esta reestructuración.
La alcaldesa ha avanzado que, en las próximas semanas, se podrá conocer con mayor profundidad los cambios que se llevarán a cabo y a qué dependencias municipales afectan.