El Ayuntamiento adquiere sillas adaptadas para tres piscinas municipales
El Ayuntamiento de Burgos, a través del Servicio Municipalizado de Deportes, ha adquirido tres sillas accesibles para las piscinas municipales Marta Fernández y para las piscinas de Capiscol y de El Plantío.
El objetivo de estos nuevos aparatos es facilitar el acceso al agua a las personas con movilidad reducida, de tal manera que puedan acceder al complejo en su silla de ruedas, y con la ayuda del socorrista, subirse al nuevo asiento y descender cómodamente para comenzar a nadar. La ventaja de este nuevo sistema es que se puede mover con total libertad, lo que permite llegar a cualquier lado de las piscinas.
Además, se facilita enormemente también la salida del agua, lo que permitirá a partir de ahora que las personas con movilidad reducida puedan disfrutar de la natación, uno de los deportes más completos y recomendados, sin preocuparse de como entrar o salir del agua.
Cabe recordar que pese a este avance en favor de la accesibilidad, tal y como trasladamos desde Canal 54, el Ayuntamiento de Burgos colgó el pasado mes de octubre un desafortunado cartel en las piscinas Marta Fernández, donde se podía leer la palabra «minusválido», cuya etimología no es la correcta para hablar de discapacidad, pues lejos de definir nada, ensalza la condición de persona menos válida, más aún en unas piscina que llevan el nombre de una atleta paraolímpica.
Desde el Ayuntamiento han adelantado que en los próximos meses se comprará una de estas nuevas sillas para el complejo de las Piscinas de San Agustín. El coste de este contrato asciende hasta los 18.000 euros.
Por último, el Consistorio ha destinado 100.000 euros para la adquisición de la nuevas gradas del complejo deportivo Bienvenido Nieto.
