Dejamos atrás la primavera más cálida de la historia, y nos adentramos en un verano seco

El próximo 21 de junio arrancará, de manera oficial, el verano. Las previsiones meteorológicas apuntan a que, en Castilla y León, las temperaturas serán más cálidas de lo normal y las lluvias brillarán por su ausencia.
Seguiremos durante la época estival con la misma tónica que en primavera. En nuestra comunidad, durante estos últimos tres meses, la temperatura media llegó a 11.4º, casi un grado y medio más que en los últimos veinte años; además, la primavera ha sido extremadamente seca, registrando datos que no se veían desde 1951. Como dato curioso, la mitad de la lluvia del trimestre se ha concentrado en la última decena de mayo.
Las efemérides de esta temporada las encontramos en abril; en Burgos se llegaron a registrar -10,1º mientras que el día 28 llegamos a los 29,8º.
Respecto a los próximos días, desde la Agencia Estatal de Meteorología apuntan a que la borrasca Óscar continuará dejando precipitaciones abundantes especialmente en el tercio oeste montañoso. Esta inestabilidad se extenderá hasta el próximo miércoles.
Respecto al próximo verano, hay un 50% de probabilidades de que sea cálido.